Mario Leito (PJ) y José Cano (UCR), diputados tucumanos que integran la comisión de Presupuesto en la Cámara de Diputados, unieron fuerzas para incrementar los fondos de los subsidios nacionales para las 22 provincias del interior: en el proyecto del Presupuesto para 2021 se consignaban menos fondos para subsidiar al transporte de todo el país que los ejecutados en 2019. El diputado que preside la comisión, Carlos Heller, concedió un incremento de $ 7.000 millones para la partida, pero los diputados tucumanos insisten en que se requieren al menos $7.000 millones más.
“Entendemos que en el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) reciben varias veces más subsidios que las provincias del interior. El proyecto de presupuesto para 2021 enviado en un principio fijaba una caja de $ 95.000 millones en subsidios para el transporte del país. Para las provincias del interior se proponían $ 13.500 millones, mientras que para el AMBA cerca de $ 65.000 millones además de otras partidas para otros subsidios. Realizamos un reclamo junto con Cano para elevar esos montos, y logramos llevarlo en una primera respuesta hasta $ 20.500 millones. Esperamos poder elevarlo $ 7.000 millones más. Luchamos para aumentar los fondos para las provincias”, explicó Leito, que integra la bancada del Frente de Todos. “Luego vendrá la discusión sobre los conflictos que tiene el transporte en este año por la pandemia, pero tratamos de aumentar los recursos para las provincias”, agregó Leito.
Cano, quien además preside la comisión de Transporte, apuntó a que se debe corregir el desfasaje entre los subsidios para las firmas porteñas y las de las provincias. “Hay un desfasaje de hace mucho tiempo entre los subsidios al transporte en el AMBA y al interior, que el gobierno nacional en vez de resolver el problema lo profundiza. El AMBA tiene casi 100 líneas de jurisdiccion nacional, provincial y del gobierno de la Ciudad, que también invierte en subsidios. El sistema está organizado con la tarjeta Sube, subsidiando a la demanda y controlando los fondos. Por eso insistimos en que debe instaurarse un sistema federal de subsidios y nacionalizar la sube. El objetivo es pasar de $ 13.500 millones originales a al menos el doble. No es algo antojadizo, son previsiones que tienen que ver con la inflación y párametros comprobables. No puede ser que se hayan propuesto para 2021 originalmente $ 13.500 millones para subsidios para el interior en 2021, lo que implica $ 4.500 millones menos que lo que se dispuso para subsidiar al transporte del interior este año”, explicó Cano.
“El transporte público requiere un profundo debate sobre la transparencia en la distribución de subsidios y la rentabilidad de las empresas. Debemos hacer estudios de costos sensatos sobre el servicio de transporte para debatir el costo real del servicio y en base a eso definir pautas para garantizar calidad para los pasajeros. Este año hubo una merma de recaudación de hasta el 70% y se requiere de que el subsidio se refleje también en una buena calidad de servicio y que el pasaje no impacte en los haberes del asalariado. El subsidio va para garantizar la rentabilidad y un buen servicio con un pasaje fijado a un valor que sea accesible. Sin subsidios la gente no tendría acceso al transporte público”, finalizó Cano.